Losa de ónix miel retroiluminada, como la poesía de la naturaleza con su textura única, que como las montañas y los ríos, fluye naturalmente y hay nuevos descubrimientos cada vez que la observas. Parece decirte que cada piedra tiene su propio lenguaje, esperando que la escuchemos. Puedes cortarlo en diferentes formas, como círculos, cuadrados o triángulos, y colocarlo en el escritorio, encimera o pared para convertirse en una decoración única.